Pasa un rato con el Señor


Hermano o Hermana:

 “Y esta es la confianza que tenemos en Él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, Él nos oye. Y si sabemos que Él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.” 1 de Juan 5:14-15

Pedir conforme a su voluntad, es pedir bien.  Dice la Palabra del Señor que “si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, Él nos oye”.  Ahora, ¿cómo saber si pedimos conforme a su voluntad?

Saber si es su voluntad o no es una de las preguntas que más nos hacemos diariamente.  ¿Cómo saber si estoy haciendo la voluntad de Él?   o  ¿Cómo pedir en su voluntad?  Parecen preguntas difíciles, ¿verdad?  Pero sólo sabremos si le buscamos sinceramente.

Cuando conoces a alguien muy bien, sabes si lo que le pides es de su agrado o no, ¿verdad?  Bueno, es igual con el Señor.  Si le conocemos y pasamos tiempo con Él, sabremos muy bien qué le gusta y qué no;  que desea para nosotros y qué no es su voluntad.

Te invito a que pases un buen rato con Él.  Escuchemos sus palabras y aprendamos a pedir conforme a su voluntad.  Este rato lo he experimentado y créeme que ha sido maravilloso en estos momentos por los cuales estoy pasando.  He sentido su presencia y no he estado solo. 

Acepta esta invitación.   El Señor estará contigo.  Recibe un fuerte abrazo.

Dios te bendiga,

Rvdo. Carlos Cardona Marcano
Pastor Iglesia Evangélica Unida
Congregación de Villa Andalucía
5 de agosto de 2011

Cantemos la Canción de Redención

Rvdo. Carlos A. Cardona Marcano
Pastor

Cuaresma, tiempo de reflexión y meditación en el Cristo que nos invita a una transformación en la vida familiar. Invitación de Dios Padre que nos muestra un camino para vida abundante en Jesucristo, escuchando la Palabra de Dios, orando, compartiendo con el prójimo y haciendo obras buenas. Una invitación para dar vida a la Palabra de Jesús, extendiendo la mano al prójimo, y comunicándoles las Buenas Nuevas de Salvación. Momento de oración por aquellos y aquellas que necesitan una palabra de Esperanza para levantarse de donde han caído. Momento para una nueva canción de Fe y Esperanza uniendo el alma y el pensamiento: perdonando, restaurando, sanando y uniendo la familia en un mismo sentir.

Cuaresma, es tiempo de perdón y de la reconciliación fraternal en Cristo. Levantemos nuestra mirada hacia la Cruz y al hacerlo pidamos a Jesús que quite de nuestros corazones el odio, el rencor, la envidia, los celos que se oponen a nuestro amor a Dios y nuestro prójimo. Aprendamos a conocer y apreciar el sacrificio de Jesús para llevar con Esperanza el mensaje de resurrección. Acompáñanos durante la Celebración de la Semana Mayor del 17 al 24 de abril de 2011 y canta con nosotros la Canción de Redención.

¿A quién serviremos?

Por Rvdo. Carlos Cardona
Pastor

Pasaje bíblico: Mateo 6:24-34

En el escrito mateano Jesús habla de Dios en una praxis de vida para vida abundante.  Reflexiona acerca de aquellas cosas que nos agobian: buscar el sustento para la comida, el vestir, el afán, el trabajo. En una forma sencilla, Jesús nos presenta el afán como un obstáculo para disfrutar de una vida abundante en el reino de Dios.

Tenemos aquí el enunciado general de esta instrucción sobre las preocupaciones de esta vida en relación con la premura del reino. Jesús en realidad no prohíbe el trabajo, ni siquiera nos invita a estar ociosos; por el contario nos presenta la opción del trabajo orientado, balanceado, como un estilo de vida para el bienestar familiar.

Jesús presenta la imagen de los pájaros que viven en una serena actividad, sin inquietudes, ni agobios. En ellos el ciclo de la vida está enmarcado por tiempos, actividades combinadas con momentos de solaz. Estos momentos de solaz son algo que el ser humano del siglo 21 ha perdido en su carrera desenfrenada por alcanzar el descanso en la jubilación después de 30 o 40 años de servicio.

Ser familia exige fidelidad, compromiso y verticalidad

Por Rvdo. Carlos Cardona
Pastor

Pasaje bíblico: Deuteronomio 30: 15-20

            La conducta amorosa y fiel de Dios para con los seres humanos nos invita poderosamente a la fidelidad. El primer fundamento de toda fidelidad humana es la fidelidad de Dios.
¿Qué entendemos por fidelidad? El salmista alaba la fidelidad de Dios, fundamento de nuestra esperanza. "Señor, tu amor llega hasta el cielo, hasta las nubes tu fidelidad”. La fidelidad de Dios se muestra especialmente en el hecho de que siempre acoge de nuevo al pueblo infiel. Dios es fiel a sus promesas y a sus amenazas. Espera del ser humano esa misma acción para consigo mismo y su familia.
En la fidelidad de Dios  se afirma nuestra perseverancia en la esperanza, nuestra fidelidad hasta la muerte. Dios nos invita en el escrito del Antiguo Testamento a tomar decisiones que afectaran nuestro existir personal y familiar.